viernes, 6 de enero de 2012

EJERCITO, BANCA E IGLESIA Y SU INFLUENCIA EN LA SOCIEDAD

Escribe muy acertadamente Arturo Gonzalez en su columna del diario Publico: “Puntadas sin hilo”, que desde siempre se ha considerado al “ejército, la banca y la Iglesia, como las fuerzas que más influyen y condicionan nuestra sociedad”, seguidamente menciona que en este momento dentro de nuestra democracia se ha conseguido `domar’ al ejército, pero a la banca y a la Iglesia parece que es más complicado. De banca y banqueros no entiendo mucho salvo las comisiones que me cobran por tener ingresada mi pensión, los intereses cuando estoy en números coloraos, y el cobro de mi hipoteca. Pero de Iglesia y religión entiendo un poco mas ya que desde muy jovencito he estado ligado y colaborado con distintos grupos asociaciones y credos religiosos, así que me gustaría reflexionar en voz alta de las razones a mi parecer que han impedido hasta ahora `Domar´, a la Iglesia.
Nos guste o no, todo ser humano está expuesto cada día de su vida a un continuo reto moral, si este es uno de los ingredientes agridulces que tiene esta vida y de la que nadie puede escapar. Estos retos tienen el poder de enriquecernos o empobrecernos, y lo que es más de determinar la calidad de nuestras relaciones con los que nos conocen. Y en este campo es donde entran las religiones, tienen la capacidad de imponer restricciones a la conciencia por medio de su “autoridad” religiosa, y esto hace que la supuesta “guía” espiritual que es el trabajo a desarrollar por la religiones, se convierte en dominación mental o lo que es mas en tiranía espiritual.
Cuando se investiga de una manera concienzuda en los diferentes escritos religiosos, y los llamados libros “sagrados” de las diferentes confesiones y credos, se da uno cuenta cuan alejados están los comportamientos de estas de lo que escribieron y aconsejaron sus fundadores, y como a lo largo de los años se han desviado de sus enseñanzas y del ejemplo que ellos trataron de inculcar.
De lo que si no hay duda es, que entre el colmo de hipocresía y doble vara de medir la que se lleva la palma de oro es la iglesia católica.
Menciona Arturo Gonzales en su artículo que “es inmoral que una entidad a la que se le dan 6.500 de euros, no sean ni hayan sido capaces de una mínima aportación y recorte de sus ingresos para aminorar la crisis”.
Entonces me pregunto ¿cómo es posible que la iglesia católica, reciba tantísima ayuda de parte de un gobierno revierta tan poca entre sus conciudadanos? La respuesta a esta pregunta está en lo importante que es el poder.
La iglesia católica se autodenomina Santa Iglesia Católica Apostólica y Romana, y las siglas son SICAR, por lo tanto a sus dirigentes se les podría llamar sicarios, lo curioso del caso es que no se autodenomina Cristiana, por algo debe de ser. Quizás la respuesta la encontremos al examinar algunos de los textos de la Biblia.
Dijo el llamado fundador del cristianismo (aunque realmente su fundador fue el llamado apóstol Pablo) y quedo recogido en Mateo 7:12 “Por lo tanto, todas las cosas que quieren que los hombres les hagan, también ustedes de igual manera tienen que hacérselas a ellos”, ahí es ná, es decir que menciono que aquellos que siguieran su doctrina en su comportamiento debería primar el buscar siempre el bienestar de aquellos que nos rodean. Y sin temor a equivocarme la historia ha demostrado que la iglesia católica lo que busca desde su fundación haya por el siglo tercero es por encima de todo el poder y control sobre sus “ovejas”.
La iglesia católica sabe que la ultima religión en desaparecer si ocurriera algún día, será aquella que cuente con mayores recursos económicos, y esto sin duda está en proporción directa con el número de fieles, así que según este razonamiento se entiende sus manifestaciones multitudinarias de cara a la galería y “trincar”, todo lo que puedan de los gobernantes y fieles.
Ellos tiene la sartén por el mango, nos dicen que tienen conexión directa con “Dios”, y que como no hagamos lo que nos dicen, iremos a parar a la “destrucción eterna”, pero si lo hacemos, listo a vivir para siempre jamás en el “cielo”, o en esta tierra hecha un paraíso, así cualquiera, todos `cagaos´, y a hacerles caso.
Ella se ha encargado de potenciar la envidia, el odio y la ignorancia, estos sentimientos fueron el origen de la guerra incivil que potenciaron y apoyaron, que hizo que España se hundiera en la incultura por casi 40 años.
Ahora con un gobierno mayoritariamente católico y llenos de miembros del Opus Dei, nos espera por lo menos 4 años de privilegios a mansalva hacia la iglesia católica, procuraremos que pasen lo más rápido posibles.
Columna de Arturo Gonzalez: http://blogs.publico.es/arturo-gonzalez/2012/01/05/el-informe-jolgorio/
Un saludo
Agapito







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